sábado, abril 25, 2009

Sábado a tres bandas

Sábado extraño. Esperaba comenzar a montar la Impala, pero el chasis no estaba listo, con lo que hubo que ponerse a rematar faena atrasada.

Lo primero fue cerrar la instalación eléctrica de la Norton después de haber cambiado el alternador Lucas por un Sparx trifásico, tal como se puede ver en la foto de abajo.

Para mi sorpresa, la moto no ha salido ardiendo al dar contacto y arrancar. Pero no me funciona correctamente el testigo de carga, con lo que tengo que revisar para localizar el fallo.

Cerrado el lío eléctrico "british style", me puse a calar correctamente el encendido de la Impala, así como montar cilindro, culata y carburador. El resultado se puede ver abajo:


Y la tercera fue la 349/4. Robregordo se acerca y la moto lleva sin tocar desde la carrera en que hice de mochilero para José María. Aquel día no iba mal, pero daba poca confianza abajo del todo, con lo cual pensaba ponerle un Mikuni como el de la 330 que llegó a España a la par. Y como en la 349 hay más sitio para trabajar me ha llevado diez minutos.

Y otros diez volver a poner el Amal, porque la moto hace lo mismo que la 330 ... ratea como un demonio y no tengo un chiclé 40 de baja para probar, porque el único que tenía está en la moto de José María. Habrá que esperar a que lleguen de UK.

viernes, abril 24, 2009

Una historia divertida

En un hilo que abrimos el otro día en el foro de "La Maneta" han colgado una de las historias más divertidas que he leído sobre una moto. Se puede leer en el lugar original (http://lamaneta.org/foromecanico/viewtopic.php?t=16415) pero la transcribo aquí por no perderla de vista.

El autor -Kiko- era gaditano, como no podía ser de otro modo, y aficionado a las motos. Un monstruo. Os dejo con su historia.

...un dia estaba pasando el dia en el aeropuerto de la parra con una mobycross que ma habia comprado mi padre que era un ciclomotor que saco mobylette con marchas parecido a la derby diablo pero esa moto tenia algo especial y era que el selector de marchas solo habia que meterle un tornillo pasante para que tuviera una marcha mas y asi tenia cinco y adamas le habia metido un 65 tombas de mobylette asi que el cilindro parecia la cabeza de un torero con la culata mu ancha y el cilindro muy estrecho ,pues a lo que vamos resulta que tenia mu poca gasofa y como alli iba la gente a correr los cochecillos de radio control pues le dije a mi colega fernando que me diera una mijilla de aquello pa echarselo con la gasofa y el me dijo tu estas loco no le eches eso a la moto que no andara y yo le dije si anda la mierda cocecillo ese porque no va a andar mi moto total que me dice alla tu y cojo y le echo un viaje de eso en el tanque y por si acaso cojo y arranco la moto al rempujon por si acaso y resulta que arranca normalmente pero claro es que el amal del 18 estaba lleno de la gasofa anterior pero en cuanto paso el cruce del aeropuerto ya en direccion a jerez na mas le meto quinta a la moto aquello se dispara como un magnum del 357 le quito el puño porque me asusto y aquello seguia andando igual total que digo po ar carajo me pliego en la moto y yo no se a cuanto venia pero la sensacion era tal que se me iba olvidando el momento en que tendria que parar(menos mal que no estaba aun el cruce de hipercor que si no me mato)total que cuando voy llegando a jerez a la altura de mi urbanizacion con los ojos metios padentro y una vela de mocos de dos metros veo a lejos el renault 4 marron del guarda de mi urbanizacion que iba por la general y na mas verlo se me ocurre,veras el susto que le vi a dar al manolo cuando lo pase,pues bueno resulta que en el momento justo de adelantarlo escuco BIMMMMMMcomo si hubiera explotao un misil el motor deja de andar y noto un dolor que te cagas en la pierna izquierda,pienso que ha pasao? miro pabajo y digo ostia y el motor?logicamente freno y me bajo de la moto y esta no tiene el motor yla pierna derecha chorreando sangre antes de que me de cuenta de nada miro patras y veo parado detras mio al manolo y me voy pa decirle que no ma pasao nada y mira que este tio era de piel morena,pos estaba mas blanco que un bote de leche sentao aun y el lado izquierdo del coche ametrallao como esos que se ven en la guerra de iraq el cristal de la ventanilla trasera reventao y las puertas to llenas de cachos de aluminio clavados miro pabajo y en mi pierna tambien estaba llena de cachos de aluminio ( depues me echaro cuarenta y tantos puntos y menos mal que llevaba levis y las botas total que lo unico que encontre del motor fue el cigueñal que estaba dentro del coche ,algun que otro piñon en la carretea y media culata,no veais la bronca que me echo mi viejo porque claro el seguro no se creyo nada y tuvo que pagar el arreglo de 4L el.yo le dije que le habia echado alcanfor en la gasolina pa quitarle la humedad pero la verdad es que no me acepto ninuna excusa y me castigo un mes,pero lo que mas me quedo en la cabeza fue el color de piel que se le quedo a aquel hombre conociendolo como lo conocia que usualmente era casi negro.

domingo, abril 19, 2009

Acabando la carburación de la 330 (y alucinando con el Mikuni)

El 18 de Enero estuvimos dando los primeros pasos en la carburación de la Cota 330 de José María, tal cual contamos en este mismo blog aquí. Para que no tengáis que iros a leer aquello, recuerdo al personal que pusimos un carburador Mikuni VM28-380 en sustitución del Amal Mk2 "tuneado" con el que la moto había salido de Classic Team.

Aquel día dejamos la moto bastante decente hasta 3/4 de gas, utilizando una combinación como ésta:

Chiclé de alta: 130
Chiclé de baja: 35
Emulsor: 169-O0
Aguja: 5F21 en posición baja
Campana: 2,5
Tornillo de aire a 3/4 de vuelta.

Con esos ajustes, la moto iba bien en baja, pero rateaba al pasar de 3/4 de puño. Pensábamos que por exceso de gasolina en alta, de modo que pedimos un juego completo de chiclés para hacer pruebas que llego justo antes de la carrera de Villar del Olmo, de la que también hablamos por aquí.

Justo antes de empezar la carrera pusimos un 115 de alta, y el cambio fue a mucho peor, de tal modo que volvimos hacia atrás, José María corrió con los ajustes de arriba y no le fue mal.

Poco después, José Ramón Piñeira usó la moto en la carrera de Robledo de Chavela ganó con ella la categoría de amarillos ... es decir, que la cosa no estaba tan dramática como pueda parecer. Pero seguía sin ir bien del todo, sobre todo en aperturas bruscas de gas. De modo que esta mañana nos fuimos al campo con el surtido completo de chiclés, y tiempo por delante para hacer pruebas, teniendo en la cabeza la referencia del gráfico de Mikuni:


De este modo, y sobre los ajustes de arriba, empezamos probando a bajar dos puntos la aguja, y la moto mejoró. Cambiamos el chiclé de alta por un 120 con la aguja de nuevo en la posición intermedia y mejoró de nuevo. Pero como luego dijo certeramente José María, mejoraba "dentro de un rango" ... que nunca era ir perfecta. Siempre encontrábamos un rateo, más arriba o más abajo. Hablo de memoria porque hicimos mil pruebas, pero la mejor respuesta que obtuvimos estuvo en un 120 de alta con la aguja arriba del todo ... lo que parecía apuntar a un 125 (que por otro lado, no existe).

Omito el recorrido completo por no aburrir, pero abrimos el carburador tantas veces, que las últimas era el propio dueño el que ponía y quitaba chiclés como si tal cosa. Pero siempre el mismo resultado ... más o menos consistente abajo, pero rateando al abrir.

Así que hicimos lo que hay que hacer siempre que uno se encuentra en un círculo: intentar romperlo. Y como no había más pruebas por hacer con el de alta, decidimos probar con uno de baja levemente mayor. Abrimos el carburador y cambiamos el 35 original por un 40. Cerramos y la moto no arranca ni para su madre ... hasta que abrimos de nuevo el carburador para poner bien el flotador que el manazas que suscribe ¡¡había colocado al revés!! Flotador arreglado, patada al canto y nada más arrancar, a la moto se le nota la voz cambiada.

José María se mete a probar en el hoyo cerrado donde comparamos cada vez que cambiamos algo y la moto va perfecta abajo, como ha ido siempre. Redonda y sin vacilaciones. Pero es cuando abre de golpe para subir un desnivel cuando la cosa cambia radicalmente ... ¡¡se acabó el rateo!! Pero mejor aún ... metida en el camino y con puño a tope no da el fallo anterior.

Por hacer el cuento corto, probamos varios chiclés de alta más hasta llegar a la combinación que lleva ahora, que va como la seda. Para quien quiera partir de la misma base, los ajustes han sido finalmente:

Chiclé de alta: 130
Chiclé de baja: 40
Emulsor: 169-O0
Aguja: 5F21 en posición intermedia
Campana: 2,5
Tornillo de aire a una vuelta y media

Lo que no me entra en la cabeza es por qué razón afectaban tanto 5 puntos en un chiclé de baja a toda la zona de alta. Entiendo que pudiera tener una vacilación al cambiar de régimen bruscamente por falta de gasolina, pero ¿¿que fallara con el puño abierto por completo?? Mi no entender.

Pero tampoco es importante. Lo que vale la pena en realidad es la cara de José María al comprobar lo fina que ha quedado ... y que al volver en el coche mi hijo Julián había entendido perfectamente lo que estábamos intentando hacer. Igual algún día tenemos un buen mecánico en casa.

miércoles, abril 01, 2009

Una pequeña historia dentro de la vida de Montesa

Cuando empezaba con este lío del blog nunca pude imaginarme lo que iba a dar de si en todos los sentidos. Menos todavía podía imaginar lo que supondría la mezcla del blog con el foro de La Maneta.

Pero entre una cosa y la otra, a veces te suceden cosas curiosas. Como lo que me pasó hace unos días con Jesús, que desde Alicante me ha contado la historia de su familia con relación a la marca. Y creo que tiene un interés que va más allá del que yo sienta.

En uno de los correos que cruzamos al hilo de su restauración de una Cota 247 MkI, me contó lo que él llamaba "una pequeñísima historia dentro de la vida de Montesa". Y me gustó tanto que le pedí permiso para reproducirla aquí. Es la siguiente:

En los años 40 mi abuelo y mi padre tenía un taller (bueno o algo así..) en Hellín se dedicaban básicamente a arreglar pinchazos de bicicletas y a vender alguna moto a las personalidades del pueblo (el señor médico, el señor notario...), llegaron los años 50 y el taller creció, nos convertimos en concesionarios de Montesa (1959) germen de nuestro grupo de empresas en la actualidad ... mi padre, que siempre ha sido muy inquieto para los negocios (más le valía tenía que dar de comer a 6 hijos y a sus padres), compró un camión de segunda o tercera mano y lo utilizaba para subir a Barcelona a recoger sus Montesa y las de los concesionarios limítrofes.
El transporte por carretera en España por esa época , década de los sesenta, estaba por desarrollar (como casi todo), en concreto el transporte de las motocicletas se realizaba en cajas de madera, armazones donde iban la motos, esto suponía un sobrecosto de material y un desaprovechamiento del espacio en los camiones además de provocar en los talleres una perdida de tiempo de desembalar con una acumulación de residuos (madera, plásticos y alambres) no se reciclaba ... bueno ahora tampoco...

A mitad de los años sesenta mi padre ya tenía 3 camiones y un acuerdo con Montesa para su distribución por toda España , creó un nuevo sistema de transporte-embalaje mucho más liviano consiguiendo triplicar la capacidad de carga pues se eliminaron los armazones de madera con lo que Montesa ahorró coste, mejoró la distribución al aumentar el volumen de carga y los talleres redujeron sus gastos de desembalaje y puesta a punto.

Sin darse cuenta mi padre había puesto en marcha los pilares del transporte en carretera para la industria de la moto ayudando a Montesa a ser más competitiva para sobrevivir a los años difíciles que más tarde vendrían.

Y por si fuera poco lujo que a uno le cuenten eso, me manda una estupenda foto en color de aquellos años, en la que se ve un camión con una solitaria Impala en la parte de arriba, y totalmente pintado con los colores de guerra de la marca.

Todo un lujo.

Y lo mejor de todo es que el padre de Jesús, Don Rafael Torrecillas Sorio tiene hoy 78 años, y le siguen quedando ganas para armar son sus hijos una colección de Montesa clásicas. Que precisamente conocí a su hijo preguntando por una palanca de freno de una MkI.

Y no sé si le he resuelto algo, pero él me lo ha pagado con creces.

Gracias por la historia, Jesús. Y que disfrutes de tus Montesas con Don Rafael por muchos años.